Ingredientes para 20 unidades:
- 600 grs de espinacas frescas (2 bolsas)
- 30 perlas de mozzarella fresca
- Piñones
- Para la masa de empanadillas: 350 grs de harina de trigo, 150 grs de aceite de oliva suave, 150 mls de agua y 1 cucharadita de sal
Las empanadillas siempre son un plato rico y rápido y suelen gustar a todo el mundo. Yo muchas veces las preparo con las obleas de La Cocinera y las relleno de atún, huevo, cebolla y tomate. En algunos blogs que visito últimamente estaban subiendo post de empanadillas pero con la masa casera, así que me dije «pues yo también las pienso hacer». Y este ha sido el resultado.
Elaboración:
Para preparar la masa necesitamos calentar el agua y el aceite juntos en una cazuela y retiramos antes de que se ponga a hervir. Este mezcla líquida la pasamos a un bol donde ya está la harina y la sal. Mezclamos con ayuda de una espátula de madera hasta integrar todo y conseguir una bola uniforme. Dejamos que repose durante 30 minutos.
Mientras tanto cocemos las espinacas en una cazuela con agua y sal durante 10 minutos y reservamos escurridas hasta preparar el relleno de nuestras empanadillas. Un truco para escurrirlas bien es una vez frías, escurrirlas con las manos, primero con un puño y luego aplastarlas entre las dos palmas. Así soltarán todo el agua.
Cuando la masa esté lista cogemos porciones, las aplastamos con el rodillo hasta dejarlas planas. (Si la masa es demasiado elástica y se encoje, dejaremos reposar otros 10 minutos más). Con un aro de emplatar o un cuenco dado la vuelta iremos cortando las obleas y las colocamos sobre papel de horno.
Para el relleno, ponemos en el borde de la oblea una pequeña porción de espinacas, unos pocos piñones y 3 mitades de perlas de mozzarella y cerramos con ayuda de un tenedor o haciendo marquitas con los dedos. Cuando tengamos todas las empanadillas las freímos en tandas en una sartén con un dedo de aceite.
Si queréis libraros de las grasas también las podéis introducir en el horno a 180º C durante 20 minutos hasta que estén doraditas.
Esta vez me lo curré un poquito más e hice las dos versiones, fritas y al horno. Mis impresiones: las fritas tienen más sabor y la mozzarella se mantiene pero llenan más y tienen bastante aceite aunque las dejes en papel absorbente. Las horneadas (foto siguiente) están más limpias de grasas y llenan menos pero para mi gusto se quedan más secas y el queso se derrite demasiado.
