• 300 grs de garbanzos
• 300 grs de espinacas frescas
• 2 dientes de ajo
• 2 cebollas
• 1 hoja de laurel
• 1 huevo
• 1 cucharadita de pimentón de la Vera
• Aceite y sal

Elaboración:

Dejamos los garbanzos en remojo la noche anterior.

En una cazuela con un chorro de aceite sofreímos los ajos y las cebollas bien picadas hasta que se doren un poco. Añadimos la hoja de laurel y el pimentón. Ahora incorporamos los garbanzos escurridos y removemos todo.

Llenamos la cazuela de agua hasta cubrir los garbanzos y echamos un poco de sal. Mezclamos y dejamos a fuego medio durante 2 horas y media aproximadamente. Iremos probando algún garbanzo para comprobar que estén blanditos.

Pasado este tiempo, añadimos las hojas de espinacas y removemos suavemente para que se ablanden y se mezclen con los garbanzos. Dejamos la cazuela a fuego lento durante 10 minutos más. Rectificaremos de sal si fuera necesario.

Por último, quitamos la cazuela del fuego, añadimos el huevo batido y removemos lentamente mientras con el calor se va cuajando el huevo. Serviremos el potaje bien calentito.

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