Receta de Magdalenas bicolor por Halloween
Ingredientes:
- 250 grs de harina de trigo
- 240 mls de leche
- 225 grs de azúcar blanco
- 225 grs de aceite de girasol
- 4 huevos M
- 1 sobre de levadura en polvo
- 50 grs de cacao puro en polvo sin azúcar Valor (2 cucharadas)
- Colorante en gel verde
¡Qué casualidad! Me toca publicar mi receta el día en que se celebra la noche de Halloween, 31 de octubre. Y encima un dulce. El año pasado, coincidiendo además con la apertura del blog, hice una tarta de chocolate blanco y queso decorada con un murciélago de fideos de chocolate. (Podéis ver la receta aquí). No quería repetir con otra tarta y estaba algo liada así que esta vez preparé algo sencillo, unas magdalenas bicolor, marrones y verdes. La parte marrón es de chocolate y la parte verde, es la masa normal pero con colorante añadido. Aunque el aspecto es un poco raro, eso sí, perfecto para esta noche terrorífica, el sabor está de lo más conseguido. ¿Queréis saber cuál es la receta?
En un bol grande batimos los huevos con el azúcar hasta conseguir una crema espumosa. Después, añadimos la leche y el aceite de girasol. Batimos bien. Agregamos ahora la harina con la levadura tamizadas y batimos hasta conseguir una masa homogénea.
Una vez tengamos la masa lista echaremos la mitad en un bol y la otra mitad en otro. En uno de ellos, añadimos las dos cucharadas de cacao en polvo y mezclamos hasta conseguir una masa marrón. En el otro bol, echaremos un poco de colorante y mezclamos hasta conseguir la tonalidad de verde que queramos. Ponemos cada masa en una jarra y vertemos a la vez con ambas manos las dos masas rellenando 1/3 de cada cápsula de papel. Una vez estén rellenas todas las cápsulas, las colocamos bien en la bandeja de horno o bien dentro de un molde metálico para magdalenas e introducimos al horno a 180º C entre 20 – 25 minutos.
Sabremos si las magdalenas están cocidas si al pinchar con un palillo, éste sale limpio. Sacamos el molde del horno, dejamos reposar durante 15 minutos y después, pasaremos las magdalenas a una rejilla para que se enfríen totalmente. Como véis, una receta de lo más sencilla y terrorífica… jajaja… ¡Feliz Noche de Halloween!
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